Ser Hombre no es fácil

"Su padre ha sido un hombre que actúa como piensa y, seguro, ha sido leal a sus convicciones". Ernesto Guevara de la Serna

Mucho se ha dicho de lo difícil que es ser mujer,  su gran valor y y principal muestra de sufrimiento, ha sido el dolor del parto, del cual se asegura que es tan fuerte, que ningún hombre podría soportarlo, y tiene algo de verdad, sin embargo, el tema del sufrimiento de la mujer, ha sido llevado tan al extremo, que ha dejado de lado que ser hombre tambien es difícil, muy difícil.

Que los hombres consideramos de maricones quejarnos de nuestra suerte, no significa que no tengamos de que quejarnos.

Me encanta la pelicula "Tropa de Élite", una producción brasileña, y en especial la parte II, donde el capitán Do Nacimento expresa que tiene todo en contra, se ha divorciado, tiene que pagar la pensión de su hijo, lidiar con su trabajo, que su ex esposa se ha liado con el que bien podría ser su principal y más peligroso adversario, tiene que lidiar con los maleantes y además enfrentarse al rechazo de su hijo, y aún así, hace lo que tiene que hacer.

Porque en efecto, eso es lo que muchos hombres tenemos que enfrentar día a día ¿Quien dijo que ser hombre es fácil? si a ellas se les ocurre que ser hombre es solo observar tetas, jugar futbol, beber cerveza y eructar, lo tienen muy equivocado.

Que las décadas pasadas de machismo hayan colocado a las mujeres en un puesto de sufrimiento, ha sido llevado al extremo, algo semejante a la posición de los israelies, cuyo pasado de sufrimiento a manos de la Alemania Nazi los coloca en el papel de los eternos sufridos y oculta sus actuales excesos en contra del pueblo palestino. De igual forma, el feminismo y el pasado de sufriemietno de las mujeres las ha colocado en el eterno papel de sufridas, ocultando que  en ocasiones se convierten en seres crueles.

Pero alto, que no voy a hacer un panegírico de los hombres, volteando la moneda y haciéndonos ahora los sufridos, sino exponiendo nuestras verdades, como un paso para lograr el equilibrio entre los sexos.

Porque recuerdo que hace más o menos una década, el feminismo irrumpió con más fuerza, y comenzó a colarse mucho y por todos lados el concepto de igualdad de géneros, creo si, que hay y debe haber igualdad de derechos entre los géneros, pero de eso a igualdad de géneros, hay mucha distancia, porque hombres y mujeres no somos iguales, nosotros no podemos parir, ni las mujeres orinar de pie.

Los roles de género que nos ha impuesto la naturaleza nos obligan a adoptar diferentes papeles, nosotros cortejamos, ellas eligen, nosotros buscamos el conflicto directo, las mujeres lo evitan, nosotros cazamos, ellas recolectan, nosotros defendemos territorios, ellas a la familia.

Ser hombre no es fácil

No, ser hombre no es fácil, porque para empezar, la existencia de un cromosoma Y y un X en lugar de 2 X, nos expone con mayor frecuencia a problemas genéticos, que hacen que siempre haya más mujeres que hombres, los hombres morimos con mayor facilidad, y tenemos mayor cantidad de problemas genéticos ligados al sexo, hemofilia, calvicie, daltonismo, es que cuando un brazo de un cromosoma X tiene un gen con un defecto, en la mujer, el organismo puede darse el lujo de elegir entre los dos cromosomas XX aquel con mayor dominancia, y por lo general las mutaciones defectuosas son recesivas, pero en un hombre, cuando un cromosoma X tiene un defecto, no hay otro cromosoma que lo anule o compense, ya que falta ese telómero o "brazo" en el cromosoma Y, resultado: los ya mencionados y varios más.

Ser hombre no es fácil, porque si podemos llorar, pero las evidencias indican que si lloras frente a una mujer que no sea tu madre, te estas echando la soga al cuello, y esa mujer que tanto manifiesta que eso es machismo y que los hombres si deben llorar, es la primera en exigirte una postura de hombre, y abandonarte si no la cumples, que si te quejas con tu mujer de un problema, ella es la primera en ponerse histérica y pedirte y preguntarte que que decisión vas a tomar, para sacar a toda la familia del problema.

Ser hombre no es fácil, porque tienes que andar toda la vida liandote a golpes con cualquiera que trata de pasarse de listo, que si no aprendes a pelear, otros abusaran de ti, las mujeres pueden odiarse entre si, y sin embargo las verás platicando amenamente, y porque no decirlo, un tanto hipocritamente, porque ellas evitan en lo posible el conflicto directo, los hombres no podemos evitarlo, y así ganamos enemigos de toda la vida, ojos morados, y puños de los cuales cuidarnos, y a veces alguna que otra costilla rota.

Ser hombre no es fácil, porque llevamos el sentido de competencia en los genes, siempre tenemos que ser mejor que el otro, no podemos descansar, tenemos que pelear mejor, beber mejor, tener mejores chicas, correr más rápido, golpear más fuerte, ganar más que el otro, ser más hábiles con las armas, con los puños y con los motores que los demás, no, nosotros no podemos descansar, y aunque ellas se quejen de que los hombres siempre estamos compitiendo entre si, eligen al más competente, y desechan a los demás.

Ser hombre no es fácil, porque tenemos que armarnos de valor,  y cortejarlas, exponiéndonos a un rechazo, nos sudan las manos, nos tiemblan las piernas, y sabemos que esa chica que tanto nos encanta, nos puede decir que no, lastimando nuestro orgullo y nuestra autoestima. Recuerdo cuando una alumna mía me confesó que le gustaba un chico, antes de eso hablaba de que a los chicos que no le agradaban les decía simplemente que no, y si insistían eso le molestaba, que no, que no era tan malo, que debían aprender a superarlo, segundos después, cuando le pregunte que porque no le llegaba al chico que le gustaba, me contestó: ¡noooo! ¿y si me dice que no?, vaya contradicción.

Ser hombre no es fácil, porque no podemos renunciar a nuestra paternidad, y nos pueden colgar una pensión para nuestros hijos, casi todos los amigos míos que conozco que se han separado, viven al día, son el dinero contado, porque la mujer cambia y de ser una dulce mujer se transforma en una maquina aspiradora de dinero y expulsadora de quejas, ¡ah!, pero ellas si pueden renunciar a su maternidad, una pastilla, un aborto, y ya está, nadie les dice nada, a veces, cortando las aspiraciones paternales de alguno que si desea de todo corazón ser padre.

Ser hombre no es fácil, porque cuando un conflicto llega, hay que defender la familia, el territorio y la bandera, y exponer la vida entre el barro y la sangre para defender lo amado y lo nuestro, a veces al contrario, hay que convertirse en invasor y cometer atrocidades en contra de gente que nunca nos ha hecho nada, y que bien pudo ser nuestra amiga en otras circunstancias.

Ser hombre no es fácil, porque cuando los hijos nacen, la mujer se vuelca en ellos, y nos dejan bastante relgados, y no nos podemos quejar de falta de atención o que ya no nos quieren como antes, la mujer ahora hace aquello para lo que ha evolucionado: para ser madre, y todo lo que interfiera con esa función, es relegado, el grado de abandono varía precisamente en grados, pero uno debe cargar con todo, sin quejarse, de lo contrario, ellas exponen toda una serie de quejas abrumadora, que supera a la nuestra.

Ser hombre no es fácil, porque si la pareja se separa, se verá limitado en sus ingresos, pagando pensión para los hijos, casa y viendo a sus hijos un día tal vez y el otro quien sabe, o cada 8 días, sin contar que la madre le hablará pestes de su padre.

Ser hombre no es fácil, porque la sociedad nos exige disimular nuestros apetitos de hombre, esa necesidad de cazar, de pelear y de tener sexo, el que los externa es un fanático del deporte, un pendenciero, o un caliente.

Ser hombre no es fácil, porque si quieres ser un hombre íntegro, deberás enfrentarte a muchas cosas, además de las ya descritas, que te coloquen por encima del estándar, ser más ético, más interesante, más viril, más caballeroso, más intrépido, más inteligente, más atlético, más exitoso,  más ecuánime y más alfa que el resto.

Ser hombre no es fácil, porque en la sociedad actual, donde tanto se promueve que el hombre no demuestre sus cualidades innatas, que llore, que se vista de modo asexual, y que adquiera características asexuadas, está confuso en su papel de género, y se pregunta ¿como debe ser un macho alfa? ¿como puedo hacer para conquistar a esa chica? ¿como hago para que no me molesten mis compañeros? si simplemente sacara su naturaleza, no tendría que preguntarse eso, porque además, las chicas, si , las chicas, se van con el que no hace caso a eso y se muestra como un hombre de verdad, es como una trampa, les dicen a los hombres que no se comporten como hombres, que eso es cosa del pasado, y así eliminan la competencia para los que no hacen caso de eso y se comportan como hombres, lógico, 40 años de liberación sexual y 15 de igualdad de géneros no pueden cambiar lo que ha funcionado durante 1 millón de años.

Teniendo claro esto, entendamos que no es la excusa para quejarnos, y comenzar a exigir nuestros derechos perdidos, en papel de sufridos, sino una reflexión de nuestra condición, y un paso para recuperar nuestra naturaleza, al diablo la igualdad de géneros, que no existe, si a la igualdad de derechos entre géneros, que nosotros orinamos parados y ellas en cuclillas.

Saludos, Xiuhcoatl.